Si te toca, mejor que sea bien, uno de esos arrimados oficiales, la cruz que arrastrarás en tu día a día te dejará llagas sangrantes, en pies, manos y no te digo nada del aguante. Pero, ahhh, tú eliges, tú te lo quedas para que no ande rotando, que no está la cosa para que tu capullo se pierda buscando espinas entre otras mejillas. ¡Todo entero para ti, apúntame su nombre!
Ponte en plan Cristo Redentor, Corcovado, abierta de brazos e ideas, disfruta bien armada y déjale a él cargando a cuestas su cruz. ¡Qué cabeza dura! Mi amor, churri, princesa o “eh, tú”, qué es hora, no hables tanto, no te pares con ese, no mires, no salgas, no compres, uf, mira el reloj, vámonos, ponte falda o pantalón, cuál es la raíz cuadrada de uno mismo. ¡Dónde está la epidural para solteras!
Y el caso es que no lo vemos venir y, luego, ya es tarde y lo quieres, ¡la hemos liado!
No sé vosotras, pero yo aún no he obtenido la fórmula exacta que te ayude a dejar de querer a quien no te quiere bien o, al menos, no te sabe querer. Pasado un tiempo, salido el ogro, no hay sonrisas, ni caras bonitas, ni anhelos y estamos con un hombre nuevo que, fijo, no ha sido un regalo de ningún cielo. ¡Y lo que nos gusta un ser salido del infierno y una buena mortificación!
Pero, no os preocupéis, próximos novios coñazo, en el fondo, los hombres nos gustáis así, de uno y otro lado, de arriba y abajo, venidos por la izquierda, cuclillas o a cuatro patas, lobito feroz. Esta vida es una guerra, más en el amor, y los soldados coñazo, parece ser, tienen la suerte de salir victoriosos...
Decidme, lechucillas, yo que ni extraño y apenas caté el sabor de un plasta en condiciones, ¿qué tienen que nos ganan esos que son poderosos por no dar ni arriesgar nada?
2 comentarios:
Pues supongo que está un poco relacionado con la "seguridad" que nos dan... y sobre todo con el miedo que muchas mujeres tienen a estar solas...
Es triste eso de no saber estar solo, triste y poco sano. Y más triste aún es no saber salir del camino marcado... ¡Lechucillas, a no aburrirse!
Publicar un comentario