27.10.08

**Planto a la lechuza encanecida**


Llegará una edad de tinieblas, de arrugas en el alma y en la piel, de recuerdos de belleza e inocencia. Olvidaremos la sensualidad y el erotismo, mientras perdemos la batalla con un cuerpo que ya no habla de juventud.
Pasaremos por la calle y no nos mirarán, nuestras canas serán el símbolo de nuestra decadencia. Olvidarán nuestro nombre y nuestras caricias serán ásperas e inútiles. Blandos, fofos y caídos, nuestros pechos ya no elevarán nuestra belleza.
Los parques columpiarán a los hijos que nunca tuvimos y las lágrimas consolarán los instantes de amantes perdidos. Extraviadas las facultades, derrocharemos despistes y erraremos los caminos.
Pero los años de placeres que han dejado estériles nuestros cabellos, los bailes, besos e ilusiones; la holganza y la provocación en nuestros cuerpos, sostienen nuestro pasado y no abandonarán nuestro futuro.
Confieso que existe una lechuza de rostro impasible y su presencia es todo un ejemplo de cómo conservar belleza, dignidad y carnes prietas, a pesar de los años de abandono a la perversión y al desorden. Canas, calvas y fragancia de tabaco oculta su osamenta, mas, en sus entrañas, crece perenne la amistad que, guardada en ella, no es sensible al paso del tiempo.

Te esperaré en la residencia, con el gotero y la piel de sandía en mi regazo.

4 comentarios:

lalechuzaimpasible dijo...

Cierto es que la familia nos la imponen y por el contrario los amigos los elegimos nosotras.
En alguna ocasión puede que nos equivoquemos en la elección y es entonces cuando aprendemos a distinguir entre colegas y amigos, pero cuando acertamos salimos enriquecidos y es algo que probablemente nos acompañe toda la vida y a lo que sí podamos aplicar frases famosas como: en lo bueno y en lo malo, en la riqueza y en la pobreza y hasta que la muerte nos separe.

Aunque algunos lechuzos consideren esto casi un expediente X y crean que la única amistad que existe entre las mujeres es por puro interés, para sacar algo de provecho u obtener algún beneficio... (no estoy equivocada en mis apreciaciones, ¿verdad?)... lo cierto es, que las mujeres también somos capaces de tener relaciones de amistad verdadera sin que exista ningún interés oculto.

Del 95 al 08 y lo que nos queda... Ole, ole y ole.

El Apostol Salvador dijo...

Acabo de leer una sarta de pamplinas, mentiras y demagogia barata...

La AMISTAD entre chicas NO existe y la AMISTAD entre chico y chica TAMPOCO...estas dos afirmaciones se avalan por si mismas, caen por su propio peso, es única y pura realidad!!

¿Cúantas amigas han terminado en la cama con el novio de "su mejor amiga"? ¿un número significativo? venga ya por dios!! la mujer intrinsecamente es egoista, muy egoista con las demás mujeres!! ¿cúantas veces habré escuchado decir a una chica "me llevo mejor con los chicos, me inspiran mayor confianza y a ellos les cuento muchas más cosas que a mis propias amigas" ? ¿cúantas veces habré escuchado esto? ¿y cúantas veces me quedan por escucharlo? nosotros seremos simples, cuadriculados, básicos pero la amistad que existe entre hombres JAMÁS la tendreís y JAMÁS la experimentareís ninguna de vosotras en vuestra vida!!

Eh, no pasa nada, sin rencores, es simplemente genética, vosotras sois asi...malignas entre vosotras por naturaleza!! envidías, rencores, falsedades, todo esto está a la orden del día entre SUPUESTAS amigas, sinceramente sois lo PEOR en este aspecto!!

Y termina diciendo la MUY ingenua que del 95 al 08 y lo que nos queda y ole ole ole...si si si, tú fiate, que cualquier lechuza de estas se ventila a tu novio (si lo tienes) en cuanto te des la espalda!! y nosotros como somos asi de "animales", ale, a la camita a disfrutar del cuerpecito de la Puri que se la está pegando a SU MEJOR AMIGA!! y al final de la noche, salimos por la puerta grande como verdaderos campeones, que es lo que somos!! para fiarse de la amiguita...

Ulises Renfield dijo...

Bonita oda a la amistad, bien sea real o imaginaria, fruto de la casualidad o de esa estúpida y egoísta necesidad nuestra de sentirnos arropados por la manada.

Como maestro del gris, he de partir una lanza por la posición intermedia entre las opiniones de la Lechuza Impasible y el Apóstol Salvador. Por supuesto, la amistad entre (algunas) mujeres no sólo es posible, sino real y estupenda, y por contra siempre habrá hombres (y mujeres) que nunca sentirán nada más que la posición central de su ombligo en ese minúsculo Universo que gira en torno a sus enormes y a la vez patéticos problemas.

Por otra parte, en mi viaje por la vida siempre me ha parecido que la amistad entre mujeres era más frágil, seguramente debido a esa necesidad vuestra de que todo os sea demostrado una y otra vez, nunca he sabido si por falta de seguridad o de fe, o tal vez por causa de esa inestabilidad propia del género femenino que hace que todo pase de la calma a la tempestad con una facilidad pasmosa para nuestro sexo (y también para el resto de nuestras simples personas).

En cualquier caso, ¿qué importa?. Más que tu disertación sobre la amistad me ha gustado el planteamiento sobre la vejez y la decadencia. Sólo un último pensamiento para cerrar: Si, como dicen, la vida es como un libro, con su inicio, su medio y su final, ¿no es más importante el acabar con un buen sabor de boca que el recordar lo bien que estuvo una parte?. Ya que cada segundo tiene la gloria de lo efímero, y el arte de la vida pasa por disfrutar cada etapa, ¿no es lo más importante el saber despedirse con una sonrisa en la boca y la sensación de un tiempo bien aprovechado?

Todo lo demás, solo o acompañado, no es más que humo, disipado por esos pequeños momentos de gloria, como el día en que vencimos por primera vez al monstruíto de la primera pantalla... ;)

LA LECHUZA dijo...

Ummm, ¡un lechuzo gris!, ¡Me encanta el gris... Mammmbo.
Por fin un lechuzo sensato, sí, nosotras también conocemos lo que es la amistad. El Súper Lechuzo opina que ni con hombres ni con mujeres podemos albergar dicho afecto, reconozcamos que se le ha calentado la cabeza y sus plumas huelen a chamuscado.
La atracción sexual es su justificación ¡Este se ha pensado que somos como perritas en celo incapaces de mantener la colita quieta ante el rico olor de cualquier bizarro español!
Pero no te preocupes, mi querido angelote (te imagino con barriguilla y tocando un arpa mientras me esperas en el cielo), en el caso de que una noche tras otra fuéramos conquistando los bellos ejemplares ya comprometidos, no sería más que una confirmación de nuestra amistad por encima de todo, de que somos generosas, comprensivas, dispuestas a darnos por entero y a entregarnos sí o sí.
¿Quién es más egoísta y rastrero? ¿quién falta a su palabra? Creo que con estos ejemplos has metido la patita...
¿Quién quiere un novio para toda la vida, ja, cuando puede tener amigos de esos que dejan una sonrisa en la boca ahora y en la vejez?
Gracias Ulises; cuando quieras, nos vamos a luchar contra sirenas y a matar a ese "molesto monstruito de la primera pantalla".

** LAS LECHUZAS PUBLICADAS **

 
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